A seis meses de la elecciones belgas y europeas, el debate político está en el aire. Hace dos años por estas fechas se formaba por fin un gobierno después de 541 sin ejecutivo, desde las elecciones de mayo del 2010. Falta medio año para las próximas y ahora los partidos empiezan a jugar sus bazas. Pero entre sus cartas hay una común a casi todos, criticar las propuestas de la Nueva Alianza Flamenca.
La NVA presentó un proyecto de programa electoral el pasado 30 de octubre. Todavía está sujeto a debate, pero las líneas parecen marcadas. En el punto de mira: la reforma de las estructuras políticas y administrativas: un nuevo parlamento con 50 diputados, la eliminación de la figura del primer ministro, la creación de un consejo belga y la división de Bruselas obligando a sus ciudadanos a escoger entre pertenecer a Flandes o a Valonia.
En Bruselas con Ñ hemos hablado con Sandrina Ferreira Antunes, profesora de ciencia política en la ULB y en la Universidad do Minho de Braga, especialista en política belga.
Escuchar: Sandrina Ferreira
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