Cada vez más mujeres se encuentran en situación de sinhogarismo, sin embargo, viven esta situación de manera diferente a los hombres. Esta es la conclusión de un estudio de la asociación sin ánimo de lucro L’Ilot.
Según datos de esta entidad, en la región de Bruselas ha crecido el número de personas que viven en la calle y hemos pasado de 4.187 en 2018 a más ded 5.300 en el pasado mes de noviembre. Además, según las últimas estadísticas facilitadas por Bruss’help, las mujeres representan casi el 21% de las personas sin hogar en la región de Bruselas. Los menores representan más del 17% y son, principalmente, las mujeres quienes se ocupan de ellos.
En el estudio de l’Ilot se desprende también que muchas mujeres intentan evitar la calles debido a los problemas que se derivan de ellas. Sabemos que el espacio público es mucho más hostil para las mujeres que los hombres ya que se enfrentan a agresiones como la violencia sexual. Por eso, muchas de ellas intentan evitarla y para ello van cambiando de alojamiento, pero sin un techo permanente.
A través de entrevistas con asociaciones que trabajan en acogida de emergencia, derechos de la mujer, cuestiones de vivienda, pero también violencia intrafamiliar y sexual, la ASBL ha intentado comprender las prácticas del sector. Además, L’Illot también ha puesto en marcha grupos de trabajo con mujeres que han conocido o que aún viven en situaciones muy precarias para determinar qué les ha ayudado o qué les podría ayudar a salir del sinhogarismo.
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