Por suerte o por desgracia, vivimos en uno de los países con una de las estructuras políticas más complicadas que el mundo haya visto. En Bélgica tenemos 6 parlamentos, 3 regiones, 3 comunidades y 4 zonas lingüísticas, además de dos partidos socialistas, dos conservadores, dos verdes y dos liberales. Podría decirse que el país es un caos, un lío, pero hay quien ve el vaso medio lleno y considera Bélgica un caso “apasionante”. Así lo cree Carlos de Cueto Nogueras, profesor de la Universidad de Granada y de la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghái. Con él hablamos del pasado, el presente y el futuro de la política belga:
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