El presunto terrorista que mató ayer a dos personas en Bruselas, Abdesalem Lassoued, no se encontraba en la base de datos de radicalizados de la OCAM, según ha dicho esta mañana el ministro de Justicia, Vincent Van Quickenborne. Sin embargo, la policía sabía de su existencia porque llevaba a cabo actos sospechosos relacionados con la trata de personas, residencia ilegal y por poner en peligro la seguridad del Estado.
En julio de 2016, un servicio de policía extranjero transmitió a Bélgica una información en la que alertaba al país de que el hombre presentaba un perfil radicalizado y quería partir hacia una zona de conflicto para llevar a cabo la yihad. Un caso común en aquella época marcada por la amenaza terrorista y la lucha contra el Estado Islámico, organización terrorista que actuaba en Siria e Irak y a la que se sumaron miles de personas de otros países, ha explicado el ministro de Justicia Vincent van Quickenborne.
Además, este año había amenazado a través de las redes sociales a un ocupante de un centro de asilo en Kempen. Esta persona lo denunció y afirmó que había sido condenado por actos de terrorismo en Túnez. No obstante, la información resultó ser falsa. Tras varias investigaciones, las autoridades concluyeron que Abdesalem solo había cometido delitos de derecho común en su país de origen.
La policía judicial de Amberes quiso interrogarlo y convocó una reunión del “JIC”, una estructura que tiene el objetivo de recopilar información en caso de un peligro terrorista concreto, que iba a tener lugar hoy, martes 17 de Octubre. Según el ministro, era una cuestión de precaución: «No se trataba de una amenaza terrorista concreta e inminente«, ha dicho.
En noviembre de 2019, Abdesalem presentó una solicitud de asilo que le fue denegada en octubre de 2020. Luego “desapareció del radar”, según la secretaria de Estado de Asilo, Nicole de Moor. El 12 de febrero de 2021 fue dado de baja del registro nacional y no ha permanecido en ningún momento en un centro de Fedasil. Como no figuraba en ninguna parte, no se le pudo localizar lo que hizo imposible organizar el regreso a su país de origen. De hecho, la orden de salida del territorio establecida en marzo de 2021 nunca pudo emitirse.
Según la prensa sueca, Lassoued estuvo también ilegalmente en el país escandinavo entre 2012 y 2014. Durante este período estuvo en una prisión a la espera de ser trasladado a otro país de la Unión Europea.
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