Después de hablar con la RECAV, que representa a muchas asociaciones de mujeres que están en contra de la gestación subrogada, damos voz al pensamiento contrario: una agencia que desde España viaja a Ucrania, en donde muchas mujeres consideran el hecho de alquilar su vientre como un trabajo, que se realiza dentro de la legalidad, por el que firman un contrato y reciben una remuneración. Nos lo cuenta en esta entrevista la portavoz de la agencia VittoriaVita, Natalia Coistra.