Hace casi un año, La Maria se grabó en video cantando una versión de la canción tradicional valenciana “Arranquen Vinyes” y lo subió a su perfil de Twitter. En poco tiempo, el video comenzó a recibir interacciones y se hizo viral.
Desde entonces, a Maria Bertomeu le han pasado “un montón de cosas bonitas”. Tantas que reconoce que en ciertos momentos ha pensado: “después de esto ya no puede haber más” pero entonces llega algo nuevo que supera a lo anterior. Ha subido a muchos escenarios, ha participado en homenajes tan significativos como el de Guillem Agulló y ha cantado junto a artistas a los que admira.
Gracias a todo lo anterior, musicalmente ya no es la misma pero lo que no ha cambiado es su amor por la cultura y el folclore valenciano. De hecho, este cariño no ha hecho más que crecer y este año, además de seguir con sus clases de cant valencià, se ha apuntado a aprender “danses”.
Sueña con llenar “un espacio gigante de gente que escuche su música” y, aunque no sea enorme, todo apunta a que este miércoles llenará la Bruselako Euskal Etxea en el homenaje que prepara el Espai Valencià Bèlgica al también periodista. Una actividad en la que ha colaborado el Casal Català de Brussel·les y en la que los versos de Estellés conectarán lugares como Valencia, Barcelona, Palma y Perpinyà.
La Maria pondrá voz, música y corazón. Tres ingredientes que junto a muchos otros estarán presentes en su primer disco, un trabajo con temas transgresores que mostrará la evolución de esta artista.
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